El proyecto de captación y potabilización de aguas lluvias desarrollado por la Facultad de Ciencias de la Universidad Austral de Chile (UACh) en conjunto con Aguas Coihuín fue reconocido con el tercer lugar en los Premios Sacha 2025, un galardón internacional que destacó su innovación entre iniciativas de más de 30 países. El sistema, actualmente operativo en escuelas rurales del sur de Chile, contribuye a garantizar el acceso a agua potable en comunidades históricamente afectadas por la escasez hídrica.
“Recibimos la noticia con mucha humildad y alegría”, afirmó el Dr. Claudio Bravo, académico del Instituto de Ciencias Químicas de la UACh y líder del proyecto. Según explicó, la iniciativa combina captación, tratamiento y potabilización de aguas lluvias, ofreciendo una solución sostenible y replicable para establecimientos educativos rurales que dependen de camiones aljibe o enfrentan dificultades con la captación tradicional.
El Director de Desarrollo e Innovación de la Vicerrectoría de Investigación, Desarrollo y Creación Artística (VIDCA) de la UACh, Dr. Carlos Fuhrhop, comentó que “felicitamos al Dr. Claudio Bravo y su equipo por este importante reconocimiento internacional. Esta innovación, ya que está siendo transferida, es un ejemplo claro de los buenos resultados que se obtienen del trabajo colaborativo entre la academia y el sector socio productivo para dar respuestas a problemas de las comunidades”.
Los Premios Sacha, de carácter bianual y surgidos en el marco de la COP-30, buscan visibilizar soluciones tecnológicas y sostenibles que contribuyan a la adaptación y mitigación del cambio climático. En 2025, el certamen reunió proyectos de más de 30 países, y el equipo de la UACh fue distinguido en la categoría gestión de recursos hídricos, compitiendo con iniciativas de distintos continentes.
Para el Director de la Escuela de Graduados de la Facultad de Ciencias, Dr. Luis Vargas-Chacoff “este reconocimiento internacional refleja el tipo de innovación con sello territorial que desarrollamos en la Facultad de Ciencias y que nutre directamente la formación avanzada de nuestros estudiantes. El Magíster en Química Aplicada se construye precisamente sobre esta capacidad de generar soluciones reales a problemas urgentes, como el acceso al agua potable en comunidades rurales. Proyectos como el de captación y potabilización de aguas lluvias muestran cómo la investigación aplicada —liderada por académicos y con participación activa de estudiantes— puede transformar vidas y contribuir a la adaptación al cambio climático. Invitamos a quienes buscan un postgrado con impacto social y rigor científico a sumarse a esta comunidad y ser parte de iniciativas que trascienden el laboratorio”.
Un proyecto aplicado en escuelas rurales
El Dr. Bravo explicó que el prototipo ya está instalado y funcionando en varias escuelas, asegurando la continuidad de las clases al garantizar la disponibilidad de agua potable. “El objetivo es que los establecimientos rurales no suspendan sus actividades por falta de agua”, señaló.
Hacia la automatización completa
Actualmente, el equipo trabaja en la automatización de la planta de tratamiento, incorporando sensores que detectan la calidad del agua en tiempo real y activan los procesos de potabilización sin intervención humana. Aunque esta etapa aún está en desarrollo, el prototipo base ya opera con éxito, otorgando independencia hídrica a distintas comunidades escolares.
Un equipo interdisciplinario
El proyecto reúne a profesionales y estudiantes de diversas áreas:
- Aguas Coihuín, empresa colaboradora y dueña de la tecnología.
- Vicerrectoría de Investigación, Desarrollo y Creación Artística de la UACh.
- Estudiantes de pregrado de la Facultad de Ciencias.
- Especialistas en química, informática y electrónica.
“Hay un componente humano muy importante en este trabajo”, destacó el Dr. Bravo, resaltando que el reconocimiento internacional fue recibido con entusiasmo y gratitud por todo el equipo.
Impacto del premio
Aunque el galardón no contempla incentivo económico, ofrece acceso a capacitaciones, acompañamiento técnico y visibilización internacional, elementos clave para potenciar la tecnología y su escalamiento. “Este tipo de distinción permite difundir nuestro trabajo y generar nuevos vínculos que fortalecen el impacto científico y social del proyecto”, concluyó el académico.


